lunes, abril 07, 2008

Trieste, pero contento

Este fin de semana hemos ido a Trieste. Se trata de una ciudad interesantísima, en la que se mezclan diferentes culturas en un enclave precioso. Por su forma, me recuerda a Barcelona, pero en pequeño.

A pesar de estar a 5 kilómetros de la frontera con Eslovenia, se percibe al instante que se trata de un país diferente. La elegancia y lo hortera en la vestimenta de los italianos, las maniobras al volante de los conductores y, por supuesto, ¡miles y miles de motos por todos lados! La de la foto, una Vstrom con infinidad de extras.