Llevaba ya sin montar dos semanas y el tiempo se ha portado para permitirme hacer 600 km en tres salidas in crescendo. El jueves me fui hacia Rakitna y Planina. Qué gusto volver a estar sobre la moto. El viernes el objetivo fue el lago de Bohinj, pero la carretera estaba cortada por desprendimientos. Tiré hacia Tolmin por una carretera estupenda llena de curvas de todo tipo, cambios de rasante y unos paisajes que van desde el verde mas claro hasta el mas oscuro. Hoy sábado he vuelto a esa zona y me he desviado para poder llegar al lago. El desvío era por una pista forestal de unos 20km. Después las familiares curvas hasta Bohinj.
No tengo costumbre de echarme flores, pero... qué moto más guapa tengo, ¿no?
